LA FRAGILIDAD DE LAS FUERTES
(Título sugerido tras leer la última novela de María
García-Lliberós “Lucía o la fragilidad de las fuertes)
Guardan su herencia en un estuche.
Allí se mezclan las infancias
con el asombro entre la ropa.
La disciplina las mantuvo
en el lugar preciso que se espera,
así se forjaron matronas dignas
rompiendo en cada siglo
la seda que oprimía sus gargantas.
De las trincheras del fracaso,
de la ignorancia de los necios
salieron, de la jaula miriñaque,
del maldito corsé
que las menguaba hasta el desmayo.
Sus voces rotas,
hilaron palabras para el futuro.
Yo recojo esa herencia milenaria
y la saco a la puerta de mi casa
para romper el último eslabón:
Nunca más propiedad privada de los débiles.
Gloria de Frutos.
Desde Valencia, España.
Hola Gloria, te he encontrado por "causalidad" en la red, y te felicito por este maravilloso poema que es un grito en libertad en contra del silencio obligado de muchas mujeres, "propiedad privada de los débiles" como tú les llamas.
ResponderEliminarHasta que no se arranque de raiz la violencia de género que semidioses de la vida y los sueños de tantas mujeres masacradas continuan talando, continuarán proliferando como hongos venenosos hacedores de sufrimiento y muerte.
¡Qué la voz en libertad, llegue hasta los aposentos del miedo y desnude las sombras del terror de las mujeres que sufren!
¡Bravo por vuestra iniciativa, y para ti mi cariño siempre!
Gracias querida Nines, con lo grande que es la red y aquí nos encontramos la primera vez... bendito encuentro que nos unió para siempre.
EliminarAunque no hablemos mucho te tengo muy, muy presente.
Un abrazo muy grande